Si los errores pudieran arreglarse tan solo borrándolos con un poco de tinta, todo sería distinto... Hoy solo nos queda seguir y aprender de ellos, entregamos lo suficiente como para ver que nuestras vidas se derrumben, caer y rendirnos no es opción, ya que ello solo nos demostraría que no servimos. Hoy es tiempo de avanzar, seguir nuestro camino en el presente, viendo como el futuro nos guiña un ojo para que le alcancemos. Tenemos miedo, es probable, pero nunca nadie en el mundo no lo ha tenido, afrontar esos miedos y crecer con ellos te marcan el camino a seguir. Tú eres demasiado importante como para terminar así, tú vales oro, tu familia y amigos lo pagan día a día para que tú estés. No nos defraudes... Simplemente te digo amigo, no te rindas.
viernes, 22 de julio de 2011
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